Castlevania 3 [Reseña]

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En esta tercera entrega, la historia de Castlevania nos lleva a seguir la historia de 5 anti-héroes trágicos, dejándonos con un final de temporada explosivo (literalmente), lo cual parece ser un "abrebocas" de lo que se viene en la próxima entrega. 
Crítica de Castlevania: temporada 3, una sangrienta y brutal ...
Aunque la animación de esta serie siempre ha sido buena, en esta última entrega la historia permite sobresalir a los realizadores de la animadora Powerhouse.


El pasado 5 de marzo Netflix subió a su plataforma los 10 capítulos de la tercera temporada de Castlevania, la temporada más larga hasta ahora y, sin duda, la de guion más desarrollado hasta el momento (aunque no deja de caer en baches por momentos). 

En esta ocasión, la serie se divide en 4 lineas argumentales muy distintas entre sí. En primer lugar tenemos a Trevor y Syph, quienes han decidido resolver la tensión sexual desarrollada en anteriores capítulos. En la introducción de la temporada se nos hace entender que, en los últimos meses, han vivido el sueño de Syph: aventuras y constante viaje. En ese devenir, la nueva pareja llega a un pueblo donde un grupo enigmático de monjes están haciendo de las suyas. Este grupo se ha tomado la iglesia del pueblo, por lo cual el regente (¿alcalde?) de esta población quiere saber qué están tramando, y para ello solicita los servicios de los protagonistas. 

Por otro lado, y tal vez la línea más interesante, seguimos la historia de Isaac, un maestro forjador (mago que crea demonios a partir de cuerpos humanos y almas traídas del infierno) que solía estar al servicio de Drácula. Al ser ahora una suerte de soldado sin amo, este se embarca en un viaje cuya finalidad parece ser crear un gran ejército de demonios que, posiblemente, enfrente a las hermanas vampiro, las cuales lideradas por Carmille, no están del todo alineadas con los propósitos de Drácula. Durante las secuencias que acompañan a Isaac nos adentramos en un viaje físico e introspectivo con el personaje, del cual conocemos algo de su historia y motivaciones a partir de su encuentro con otros personajes, cada uno de ellos con un carisma que afecta a Isaac de particular manera. 

La tercera línea de esta historia es entretenida en su desarrollo, aunque extremadamente previsible en su resultado. Esta línea sigue al otro maestro forjador de Drácula; Hector, quien fue tomado como prisionero de guerra por Carmille y lo lleva a su castillo con la finalidad de utilizarlo como un medio para expandir su ejército, crear demonios. Aquí se nos presenta a la familia de 4 vampiras que pretenden tomar control sobre gran parte del territorio continental. 

Por último, la más tediosa de todas las historias es la de Alucard. Al finalizar la segunda temporada este había asesinado a su padre, quedándose como único y solitario custodio del castillo de Drácula sumergido en la más profunda melancolía. En estos 10 capítulos Alucard va a relacionarse con dos muchachos de origen chino quienes huyen de una emperatriz vampiresa que tiene el control de su territorio. En ese andar llegan al castillo de Alucard, de quien buscan ayuda para combatir a su verdugo. Esta historia, creo, pretende mostrarnos el lado más benevolente de Alucard y que representa su lado humano herencia de su madre. Sin embargo, el desarrollo de esta historia fue bastante lento y vacío, no aportó mayor peso al desarrollo de la historia en su conjunto salvo en el final, el cual nos muestra a las claras como esta relación de Alucard con los jóvenes chinos va afectar el carácter del primero de cara a una cuarta temporada, la cual fue confirmada por netflix en sus redes sociales. 

En síntesis, esta temporada de castlevania me deja la sensación que fue el primer acto de una historia de dos partes, la cual debería tener su clímax en la siguiente temporada. Esta característica es, a la vez, la principal debilidad y fortaleza de esta tercera entrega. Hay episodios que me dejaron la sensación de ser una pérdida de tiempo: diálogos sin sentido, desarrollo de personajes que ya conocemos de episodios anteriores, y en general una historia que se cuece a fuego muy lento. No obstante, debo decir que los dos capítulos finales compensaron la espera de los ocho anteriores. El desenlace lleno de combates, nuevos conceptos de la magia (como el pasadizo infinito) y la hermosa animación me dejaron enganchado a esperar la próxima temporada. En resumen, aunque buena en su conjunto, con castlevania siempre me queda la sensación que los guionistas invierten demasiado tiempo en desarrollar aspectos de la historia irrelevantes, de manera que entorpecen el desarrollo de una premisa interesante y ultracomprobada en 30 años de videojuegos. Un aspecto que, espero, sea resuelto en una cuarta temporada que ponga esta historia en el lugar que se merece. 

Un abrazo y, si pueden, quédense en casa. Tiempos como los que vivimos requieren de usar los medios digitales como una forma de organización no presencial, aprovechémoslos. Castlevania es una serie original de netflix.

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